1. Preparar dos almohadillas (gasas)
oculares estériles y cinta adhesiva quirúrgica. Cortar la
cinta en trozos de 10 cm.
2. Pedir al paciente que cierre los
ojos.
3. Limpiar la frente y región malar con
alcohol para remover la grasitud de la piel, esto ayuda a la
correcta adherencia de la cinta adhesiva.
4. Doblar una almohadilla (gasa) por la
mitad, colocarla sobre el ojo cerrado, y sostenerla en su lugar con
una mano.
5. Aplicar una gasa no doblada sobre la que
está doblada.
6. Adherir firmemente la gasa no doblada a
la frente y región zigomática. Para prevenir el parpadeo,
más sangrado, o tumefacción, el parche debe ejercer
cierta presión sobre el párpado. El paciente no
debería poder abrir el párpado mientras esté
ocluido. La cinta adhesiva no debe extenderse hacia el maxilar o
hacia la boca porque los movimientos podrían provocar la
caída del parche.
7. Si el paciente tiene alguna
contusión o laceración en el globo o sus estructuras
anexas,en lugar de colocar el parche, aplicar con cinta
adhesiva un escudo fenestrado de aluminio sobre el globo,
para proteger esos tejidos de un mayor daño hasta que
cicatricen o hasta que se reparen quirúrgicamente en forma
definitiva. Apoyar el escudo sobre el reborde orbitario superior y
sobre la región cigomática. No colocar un parche apretado
en un globo abierto.